Ir al contenido principal

Capítulo 8 - Home, sweet Home Parte 2



Ya habían terminado de comer, y la hora de los postres era la preferida para algunos. Y les venía perfecto para aprovechar el tiempo charlando y paseando por aquel enorme jardín.

-Kim Hanna-ni.- se le acercó Geum JongDong ofreciendole un trozo de sandía.
-Gomawo, JongDong-ni. (Gracias)
-¿En qué piensas?
-En lo que dijo JiHoo-nim antes en la comida.
-Mmmm, fue bonito lo que dijo.- sorbía fuertemente. Hanna lo observaba.
-Fue... espeluznante. Espero que no lo haga de nuevo.- volvió a sorber JongDong.
-Aju jaemi, jaemi.(Muy divertido, divertido)- ella se reía. Jongdong lo volvió ha hacer.
-Ya... Come con la boca cerrada, y no sorbas tanto.- le reñía como una mamá.- Mira.- se le caía el agua de la sandía por las comisuras- Aigoo.- Hanna se acercó para limpiarselo.- Agi, agii... (bebé)- se burlaba.
-Annyo.(No.)- le sonría JongDong.

Parecía imposible, pero siempre dichas escenas las contemplaba alguien desde lejos, y casi siempre solía ser él.

-Ya, ya, ¿qué se supone que hace?
-¿Cómo?- le comentaba Chang Tao mientras se metía en la boca todos los macarons que podía.
-Míralos, sonriendo. Seguro que lo ha hecho a posta para que ella actuara así, y después...- se ponía cada vez más nervioso.
-Kiss-u? (¿Beso?)
-¡Aaaah!- se llevaba las manos a la cabeza.
-¿Quieres?- le ofreció un macaron.

Kim Hanna y Geum JongDong bajaron las escaleras hacía los jardines para dar un paseo.

-¿Dónde van?- preguntó Tao. SooDae levantó corriendo la cabeza.
-Aja, aja. (Vamos, vamos)- lo cogió de la manga de la camiseta y lo arrastró con él.
-Aigo!- se quejaba.- Tenía hambre.

Los dos amigos, uno arrastrado por el otro, comenzaron a perseguir a Hanna y a JongDong.

-¿Dónde van?- preguntaba Im SooRi al verlos irse tan de repente.
-No te preocupes.- le dijo MinSoo.
-Dee...- los siguió con la mirada hasta que los perdió de vista.- Omo, ¿y JoonChae-oppa?- volcó su preocupación en algo más importante.

Bajo, en los jardines, los dos compañeros y ahora amigos se paseaban y comentaban cosas de la agencia.

-Entonces... ¿mañana hay reunión?- preguntó JongDong.
-Dee, se que es demasiado precipitado. Y todavía falta gente... Peero bueno.- sonrío.- lo importante es llevar lo más rápido posible esto. Y tener buenos resultados.
-Dee, pero con tiempo se hacen mejor las cosas.
-En parte por eso empezamos tan temprano a prepararlo. No queremos... no quiero, que se deje en el olvido.
-Mmm, dee, tienes razón.

Detrás de ellos, jugando a espías, los perseguían SooDae, a la cabeza; y Tao, siguiendole el juego.

-Ya. YA.- le intentaba decir bajito para que no los descubrieran.- Nos van a descubrir por tu culpa, Tao.
-Omo, mian. (Lo siento)- le contestó igual después de esconderse.

Im SooDae comenzó a hacerle señales sin sentido a su compañero de juego. Chang Tao lo miraba atónito sin saber bien que hacer.

-"Yo te sigo."- le decía entre dientes. Se aproximaron lo suficiente para escuchar algo de la conversación.
-Pues te necesito más que nunca.- Im SooDae miró impactado a su amigo cuando escuchó decir eso a Hanna.
-Tranquila, vas a tener mi apoyo. Todo va a salir genial.- las caras de SooDae eran inexplicables tras aquellas palabras.
-Con la aprobación 100% de mi padre, ya soy feliz.- "¡¿Cómo?!", pensaba el pobre SooDae.
-Dee...- dijo un poco temeroso.- Yo confío en que la tengas, pero me sigue provocando un poooco bastante de respeto...
-Con lo dulce que es Kim MoonSik.
-Da miedo.
-Sí, eso no te lo discuto.-se reía ella.
-Me pondré detrás tuya para cogerte si hace falta.
-Omo...- Hanna se ruborizó. Al mismo tiempo que SooDae comenzó a pegarle al aire y a maldecir bajito.- Gwiyeo, JongDong-ni, gomawo. (Que lindo, gracias)- él asintió con una sonrisa.

Tao tuvo que sostener a su compañero, estaba llegando a su limite de paciencia, de no salir ahí, hubiese esperado lo peor. Y salió.

-Annyong. (Hola)- salió de la nada Chang Tao.

Hanna y JongDong se sorprendieron un poco, no habían escuchado ningún ruido y de repente apareció, era muy raro. Im SooDae en cambio se estaba carcomiendo por dentro. ¿Qué estaba haciendo su amigo? ¿Él debía también de salir de ahí? Se estiraba de los pelos por no saber que hacer. Estaba nervioso. Y se escabulló.

-Omo, kamjakia. (que susto)- se sobresalto JongDong.
-Mm, Chang Tao, ¿qué haces por aquí?
-Mmmm... Estaba.- miró el arbusto donde se "encontraba" SooDae.- Paseando.- determinó sin mucha seguridad.- Hanna alzó el cuello en la dirección que lo había hecho él.
-Ooh. Dee. Este jardín es muy bonito. Y muy tranquilo para pasear.
-Dee... La madre de Choi JoonChae lo cuida mucho.
-Ah...- se hizo un pequeño silencio, un tanto bastante incomodo.- Y... ¿vosotros en qué trabajáis?- "Típica pregunta que te saca de apuros... espero que funcione", pensaba.
-Somos fotógrafos.
-Aaah, por eso antes me has dicho lo de modelo.
-Se podría decir que sí.- se echó las manos a los bolsillos del pantalón.
-Tienes buen ojo, eso no te lo discuto.- se piropeó él mismo.
-Siempre, por favor.
-Omo. Jakaman. (Un segundo) Hanna-shi. ¿Dónde esta el baño?
-Entra dentro, donde antes.- le indicó.
-Okay, gomawo. (Gracias) Si me disculpáis.- los dos asintieron con la cabeza, y JongDong salió raudo de allí.
-Pues...- intentaba seguir la conversación.- Puede ser que te pueda conseguir un buen trabajo...- lo miraba de arriba a bajo.- Date la vuelta.- le pidió.
-No sé si me estas midiendo o seduciendo.- río.
-Tranquilo, lo segundo no es.- le sonrío.- Te apetecería ir a los castings de un nuevo proyecto.
-Jinjja? (¿En serio?) ¿De la Sons of Golden?- le preguntó emocionado.
-Dee. Estoy buscando chicos internacionales. Y me comentaron que eres chino. Me gusta tu porte. Sí.
-¡Omo! Gamsahamida, gamsahamida. (Gracias, gracias)- le cogió de las manos. Hanna se echó a reír incómoda.
-No es nada, en verdad. No se si es un poco egoísta la propuesta.
-Annyo, Annyo! (¡No, no!) Estaré allí cuando quieras. Donde quieras. El día que sea.- Hanna no paraba de reírse, Tao era un chico muy gracioso, parecía serio pero tenía a un niño en su interior.- No te arrepentirás.- pegó un saltito.
-Seguro que no.

Comenzaron a andar por el jardín, Tao todavía llevaba la emoción en el cuerpo, y Hanna se sentía orgullosa. ¿Cómo una persona puede ser tan feliz con una pequeña noticia?

"-Estamos muy orgullosos de vuestro trabajo, y nos ha gustado mucho. El Book es vuestro.
-¿En serio?- las dos amigas se pusieron a chillar y abrazarse como locas.", eso recordaba ella.

En ese instante Tao recibió una llamada, se disculpó con Hanna, y la dejó sola andando por el jardín.
Se sentía muy bien ese día. El aire se movía muy poco, el cielo estaba hermoso con sus pequeñas nubes, que dejaban pasar unos cuantos cálidos rayos de sol. Todo acompañaba para que hubiera paz. Los árboles, las plantas, el tranquilo paseo, el aroma que se movía con el aire, JoonChae y KiBum hablando,... Se quedó quieta. No quería molestar. En la comida los había notado tensos, pero tampoco se había enterado de mucho.

-Dee, tranquilo, solo creía que me había acostumbrado...- se estiro JoonChae.- Pero parece que no.
-Ella esta perfecta ahora, no tienes que preocuparte más.
-Tú tampoco.- se miraron.

El ambiente entre ellos se calmó al instante.

-Omo.- Río dulcemente KiBum- ¿Te has dado cuenta de que te gané las dos veces?
-¿Dos?- se puso a recordar y le vino a la cabeza la "discusión" que habían tenido en el coche antes de venir- Eiis, nunca dijimos que habías ganado tú.
-Las palmaditas en el hombro creí que habían sido suficientes, pero la próxima vez me compro un cartel o me lo dibujo en la cara. 
-Yo, yo te lo dibujo.
-Ja ja ja.- río sarcástico.

Hanna intentó salir de ahí pero a la conversación se le unió, que vino de improvisto; Im SooDae.

-Ya, Hyung's. ¿Sabéis donde esta Tao?
-Annyo. (No)
-Annyo, mian. (No, lo siento)
-Mmmm, gwenchana. (No pasa nada) Ya aparecerá. ¿Puedo hablaros de una cosa?

Era su oportunidad, la de Hanna, para salir por otro lado. No quería seguir escuchando a hurtadillas, era muy feo por su parte. Pero en el momento que intentó salir, algo que ella creyó que no existía, se interpuso en su camino, y cayó al suelo.

-¡Ah!- se escuchó junto con un golpe.
-¿Qué ha sido eso?- dijo KiBum alarmado, todos se pusieron tensos y fueron a mirar que había pasado.

No tuvieron que avanzar mucho, en seguida pudieron ver Kim Hanna en el suelo, con la cara hundida en el césped y muerta de la vergüenza.

-¡Hanna!- dijeron alarmados.- JoonChae fue corriendo a levantarla del suelo.
-Ya. ¿Estabas escuchando conversaciones privadas?- le decía mientras la levantaba.
-Annyo. (No)- se ruborizó.
-Eotteon, (Entonces) ¿qué hacías por ahí?
-Anny-mida, (Nada) solo estaba paseando.- se sacudía la tierra de la ropa.
-Gwenchana? (¿Estás bien?)- le preguntó Lee KiBum. SooDae se quedó con las ganas y la palabra en la boca.
-Oh, dee, dee. Yo-yo ya me iba, dee, eso hacía.- no lo decía segura.
-A mi no me engañas. ¿Qué has escuchado?- le insistía Choi JoonChae.
-Anny-midaaa... (Nadaaa...)- aprovechó para escabullirse.
-Yaa, Yaa! Neon! (¡Tú!) Ven aquí ahora mismo.- JoonChae fue tras ella.

Im SooDae hizo también el amago de ir pero KiBum lo cogió del brazo. Este lo miro.

-SooDae-ah... ¿No tenías que decirme algo?- los dos se quedaron mirando a JoonChae y a Hanna que se "peleaban" a lo lejos.
-Ya, gwenchana? (¿Estás bien?)- JoonChae le miro el brazo malo. KiBum y SooDae seguían observandoles.
-Dee, dee, no es nada.
-Jinjja? (¿De verdad?) Siempre te haces la fuerte y después recaes muy rápido.- Kim Hanna le pegó en el brazo muy fuertemente.
-¡AAAh!- se quejó. Ella se río con fuerza.
- Deeebil.

Empezaron a perseguirse y hacerse cosquillas, era un ataque que siempre funcionaba, eran como niños pequeños. Se notaba que todavía existía algo entre ellos, pero ni ellos mismos sabían que era exactamente.

-Hyung... Naneun... Kim Hanna-shineun... salanghaeyo. (Yo... estoy enamorado de... Kim Hanna)- le confesó Im SooDae a KiBum mientras la veía irse corriendo con JoonChae.
-Ara... ara. (Lo sé... lo sé)- respondió el amigo.- Geunyang... jogeum gidalyeo. (Solo... espera un poco)- le dio unos golpecito en la espalda.
-Gi-da...lyeo? (¿Es-pe...rar?)

. . .

-Dongsaeng!- la llamaba la aguda voz de Park YooNa.

Hanna subía corriendo las escaleras con Joonchae, como si estuvieran haciendo una carrera.

-Unni!- le respondió muy cerca.
-Dios, me vas a dejar sorda.
-Mian. (Lo siento)- levantó la mano.- Mm, wae kure? (¿Qué pasa?)
-Oh. Nos vamos ya.
-¿Tan pronto?- dijo JoonChae.
-Es tarde en todo caso.- JoonChae miro su reloj, y se quedó sorprendido.
-Bueno... ¿pues tenéis que coger las maletas?
-Dee.
-Te ayudamos.

No les costó mucho subir las maletas al coche, aunque eran una cuantas.

-Ya, ya, ¿para cuantos días has reservado?-preguntaba Im SooDae.
-Dos semanas solo.
-¿Solo? ¿Y para qué te llevas tanta cosa?
-SooDae-ah, si tú no te cambias de ropa, no es culpa de la gente.- le soltó su hermana.- YooNa espero que disfrutes el viaje.- "palabras amables viniendo de ella.", pensaba.
-Deeee, gamsahanmida. (Síiiiiiii, gracias)- le hizo una pequeña reverencia.

Kim Hanna la arrastro a su lado y le dio un gran abrazo.

-No caigas en sus redes.- le dijo en el oído. YooNa comenzó a reír.
-Annyoo. (Noo.)
-¡Bon Voyage!- le dijo la amiga.
-Dee!

Todos comenzaron a despedirse y a darle consejos inútiles sobre los viajes. Que lo disfrutara al máximo, y que no se perdiera ninguna oportunidad que le podía brindar en aquella hermosa aventura,... y un montón más de cursilerías de amigos.

-Mm, Jakaman... (Espera un segundo...)- todos miraron a Chang Tao.- ¿Y él novio?- lo buscaban con la mirada.
-También falta KiBum-oppa.

A la llamada de sus amigos se les vio bajar hacia donde estaba estacionado el coche.

-Hablando de los reyes de Roma.
-Jeobo. Apalli! (Cariño, ¡date prisa!)
-Dee.- fue corriendo hasta el coche.- Pues... aja.(Vamos)- YooNa asintió, y Song Jonghyun y Park MinSoo subieron al coche. Ellos los iban a acompañar al aeropuerto y allí se despedirían tranquilamente.- Bueno chicos, os quiero un montón.
-Qué frío oppa.
-Dee, eso no ha sonado igual de bien que antes.
-¿Te vas a ir sin despedirte de mi? Los demás me dan igual pero...
-¡Yaa!- dijeron todos.
-Miaaan. Eotteon. (Lo siento, entonces)- lo abrazó muy fuertemente. JiHoo se sorprendió.- Cuida la maldito.- se separó un poco de él.- ¿Qué digo? Seguro que la cuidarás bien.- ella le sonrío, y a Park YooNa casi se le caen un par de lágrimas.

Kang JiHoo al oír esas palabras sintió pena en su interior y reaccionó abrazandola el doble de fuerte. Lo que sí sorprendió a todo el mundo, pero sobre todo a Hanna. Kang JiHoo no era una persona muy de abrazos, si se podía decir así, y ese acto sincero, viniendo de él era un gran muestra de gratitud.

-Omo, jiltu. (Estoy celosa)- dijo Park YooNa, todos rieron.
-Ya, ya...- decía avergonzada.- Borigo ka, kaaa... (Déjame y vete, vete...)
-Dee.- le acarició la cabeza.- ¿Tú también quieres un abrazo?- le preguntó JiHoo a Joonchae.
-Annyo. (No)- se apartó.- Kaa, ka. (Vete, vete.)

Subieron al coche, y no tardaron ni cinco minutos en desaparecer de aquella casa. Solo serían dos semanas, pero a veces dos semanas parecían una eternidad sin las personas que más aprecias.
Después de ellos, las amigas de YooNa y Geum JongDong también se despidieron, tenían otros compromisos. Así que quedaron pocas personas, pero todas conocidas.

-¿Os apetece quedaros a cenar?- preguntó JoonChae.
-Oppa, yo no puedo, quedé con unas amigas. Mianhaeyo. (Lo siento) Otro día te invitó a cenar.
-¿Soló a él?- soltó SooDae, su hermana lo miro fulminante.
-Dee, gwenchana. (Sí, está bien.)
-Puees... si ella se va... Yo me quedó.- les dedicó una gran sonrisa Hanna, y entró para dentro de la casa.
-Jaemi. Jaeemi... (Que divertido, que divertido)- se reía a carcajadas Tao. Al ver que SooRi y JoonChae lo habían fulminado con la mirada, cerró la boca, se puso recto y entro también.
-Annyong, noona. (Adiós)- se despidió su hermano.
-Que asco de niñata... hfalfjdksfshdafk, ¡ah!
-Tranquila fiera. Tú no le hagas caso, arasseo? (¿de acuerdo?)
-Dee... Eotteon (Entonces), me voy. No os acerquéis mucho a ella.- subió al coche.
-KiBum, aja. (vamos)- le dijo JoonChae.

Cuando se giró para ir detrás de él, KiBum ya estaba unos pasos más adelantado. JoonChae solo se quedó algo extrañado, pero aceleró el paso y alcanzó a su amigo. Todos los demás se encontraban en el porche del jardín, ya había caído la noche, y el fuego de la chimenea de fuera era necesario a más no poder.

-Qué frío.- dijo Kim Hanna tiritando.
-Oh, ¿quieres mi chaqueta?- le preguntó preocupado SooDae.
-Annyo (No), yo subo a por una de Choi SeungChae.- dijo el anfitrión.

Pero en ese momento inesperado alguien le puso una chaqueta por encima. Hanna se giró para ver quien era. Había sido KiBum.

-Rápido y eficaz como siempre.- comentó Chang Tao.
-Go...(Gra...)- él se sentó seriamente en el banco de madera.- mawo... (cias...)- llegó ella a comentar.
-¿Ya... ya no hace falta? ¿Queréis algo vosotros?- preguntó desinteresado.
-Comeeeeer.- añadió Tao.- ¿Pedimos pizza?
-Dee...- Im SooDae miraba a su hyung preocupado.- Pidamos eso.
-Vamos a por el teléfono.- los dos amigos siguieron a JoonChae.

Kim Hanna y Lee KiBum se quedaron solos.

-Hanna...- logro decir, aunque muy bajito.
-Dime.- le dijo servicial. Él la miro a los ojos, provocando que esta se sonrojara, parecía que la estaba leyendo por dentro.
-A...- fue hablar pero se calló de inmediato.- ¿Quieres que te cure la herida?
-Omo.- empezó a reír como una loca. Hanna se había asustado para nada.
-¿Dije algo gracioso?- le preguntó preocupado.
-Annyo. (No.)- sonrío con fuerza.- Okay.

Se dirigieron a la cocina, y cogieron prestado el botiquín que había en aquella casa. Ella se sentó en uno de los taburetes, y tras quitar las primeras vendas y prepararlo todo Kibum procedió.

-Estaba preocupada por lo que me ibas a decir antes, por eso me he reído.
-Ah...- contestó sin ganas.
-Como antes en la comida estabas triste... Y en la conversación con JoonChae-ah en el jardín había sido un tanto rara...
-Osea... ¿Qué nos has escuchado antes?
-Wo? Waeo? Nega? Annyo.(¿Qué? ¿Por qué? ¿Yo? No.)- se puso nerviosa, y ahora el que se echo a reír fue él.- Ya, ya, no escuché nada. Yagsog, yagsog. (Te lo prometo, te lo prometo)
-Annyo (No), no me lo creo.- Hanna abrió la boca asombrada.
-Que fuerte que no me creas KiBum-ni.- él la miro de reojo.- Hajiman... jogeum... dan-eo... (Solo... unas pocas... palabras...) Ya no me acuerdo.
-Dee...
-¡Mm! ¡Mm! JINJJA. Jinjja. Jiiiinjja. (DE VERDAD, de verdad, de verdaaaaad)- el esbozó una pequeña risilla.
-Arasseo (De acudero), deja de moverte.- se quedó inmovilizada, él bajó la cabeza para continuar curandola. Su rostro se veía serio, pero no por que necesitara concentrarse en aquello que estaba haciendo.
-Ya! Ya! ¿No podéis ejercer de médicos en otra parte?- entraron todos a la cocina.
-Uuuuh, ¿estáis jugando a los médicos?- comentó picarón Tao, el cual recibió un capón de Im SooDae, que venía detrás de él.
-Omo. GWENCHANA KIM HANNA-SHI? (¿ESTÁS BIEN?)- fue corriendo a donde estaba, pero nada más acercarse y ver la herida retrocedió colocándose la mano en la boca.- Que asco...- dijo flojito.
-Wuaaaa. JAEMI. (QUE DIVERTIDO) ¿Lo puedo tocar?- preguntó Chang Tao.
-ANNYO! (¡NO!)- dijeron todos al unisono.
-Dee...- se apartó de la escena.
-Hanna-shi... Mianhaeyo... (Lo siento...)- Hanna, Kibum y JoonChae lo miraron.- No puede estar allí para salvarte.- se arrodillo y le cogió la mano derecha. Hanna se soltó mirandolo con un poco de desprecio.
-Son cosas que pasan, Im SooDae.
-Levántate del suelo, por dios.- lo cogió JoonChae.- Pues si que es grande...- se acercó a ella para poder verlo mejor.
-¿GRANDE? GRANDE ES POCO. ES ENORME.
-Seep, yo no se como no te desangraste por el camino hacia el hospital.
-Que exagerado.- río Hanna con su comentario.
-¡Ah!- SooDae se le acercó corriendo, cogiéndola de los mofletes.- ¡Le falta sangre! ¡La veo muy pálida! ¡KIBUM NECESITAMOS UNA TRANSFUSIÓN!
-QUIIIITA.- Hanna inconscientemente lo apartó con el brazo izquierdo.

Lo que hizo que manchara al pobre SooDae de sangre, y que ella cayera hacía atrás. Por suerte Choi JoonChae se encontraba a su lado, la cogió a tiempo. Los dos se quedaron embobados esperando a que uno de los dos reaccionara. "Esta vez no me he caído... ", pensaba Hanna. KiBum los miró fulminante. Él tenía razón. Todos se giraron rápidamente al escuchar un golpe en el suelo.

-¡SOODAE-AH!- gritó Chang Tao.

El amigo se había desmayado. Todos fueron a socorrerlo. Aunque el único que sabía hacer algo era Lee KiBum.

-Ya. Apartaros.

Todos le hicieron caso, dejaron que KiBum trajera de nuevo a SooDae tras aquel desmayo. Sin embargo, las miradas y las dudas seguían surcando aquella cocina. Cuando consiguieron despertar al bello durmiente, decidieron trasladar la reunión al salón de dentro. Menos frío y más cómodo.

-Ya están aquí las pizzaaaas.
-Deee.- confirmo JoonChae y fue a recogerlas. Las dejo en la mesa del salón y fue a la cocina a por unas tijeras para cortarlas.
-Omo. Ya están las pizzas.- se dirigió a Hanna que estaba lavando se las manos.
-Dee.
-Has visto.- lo miró- Hoy hemos comprobado que podemos pasar el día juntos sin arrancarnos los pelos.- los dos se sonrieron falsos.
-Pero que gracioso. Y tienes que venir a estropearlo. Ya ni recordaba cuaaaaanto te odio.- el dejó de sonreírle.
-Si me dijeras porque estas enfadada...- dijo bajito.
-Weo? (¿Qué?)
-Annyo. (Nada)
-Weo? Bara, bara. (¿Qué? Dime, dime.)- le dijo en otro dialecto. Joonchae comenzó a reír a carcajadas.
-¿Y eso que ha sido? ¿De donde eres? ¿De Busan?- reía aún más fuerte, ella se acercó.
-Yaaa, baraa, bara.- seguía con la gracia.- Aigooo.- le pegó.
-Eis, ¿y esto a qué viene?
-Ya.- se le quedo mirando fijamente.- Choi JoonChae-shi.
-¿No me puedes llamar de otra manera que no sea tan formal?
-Omooo,- rió- ¿cómo quieres que te llame? Chakia? Yeobo? My love?
-Exagerada.
-Omo- se le acercó- y si te llamo... Nae ma-eum. (Mi corazón)- le dijo al oído.
-Eiiis, aparta.- se puso nervioso y colorado.
-Joonchae.- reía exagerada.- Ai-aigoo- lo cogió de los mofletes.- Baboo. (Tonto)- lo miró con cara de asco.
-Jenjang... sajin jagga... (Maldita... fotógrafa...)

Hanna se apartó de él riéndose de lo ingenuo que era, pero JoonChae contra-ataco haciéndole una zancadilla, por lo que cayó al suelo.

-Omoo, gwenchana chakia? (¿estas bien cariño?)- le ofreció la mano, poniendo la voz más dulce que pudo.
-Que bien actúas...- lo maldecía por dentro, y aún desde el suelo.

Mientras JoonChae la ayudaba a levantarse, SooDae entró a la cocina.

-Mianhaeyo. (Lo siento)
-Dee, dee, jaemi... (Sí, sí, que divertido...)- "Eh, no", pensaba ella.
-¿Qué hacéis?-preguntó SooDae.
-Mmm anny-mida. (Nada.)

Im SooDae se quedo extrañado. JoonChae cogió la tijera y salió de allí arrastrando a SooDae hasta el comedor, Kim Hanna iba detrás. Pero al amigo se le había quedado una duda en mente, que ni KiBum se la pudo contestar en su momento. "¿Siguen siendo algo?".




Comentarios

Entradas populares de este blog

Capítulo 21 – Breaking news

Casi no se miraban, y claramente hablaban lo justo y necesario. Joonchae no sabía si debía arrepentirse de aquella noche, pues Hanna había dejado de ser la misma. Pero no quería arrepentirse de aquello. Había sido demasiado bueno para poder olvidarlo. Ella no recordaba nada, pero se arrepentía de haber bebido. Su maldita cabeza nunca recuerda que el alcohol no es un aliado. Aún así, uno de los dos recordaría cada beso y cada caricia de esa noche, lo que le haría enfermar mucho más. Porque aquello no era otra cosa que una maldita enfermedad. “¿Cómo he podido acabar enamorándome de ella?”, pensaba mientras la miraba. El viaje de vuelta a Seúl fue más duro y aburrido de lo que él había planeado. Pero no siempre los planes salen como uno quiere. Cuando aterrizó el avión, Joonchae hizo un séptimo intento por hablar con ella, y por lo menos dejarle que se explicara. No quería volver otra vez al principio, quería recuperar otra vez la confianza de ella. Él podía dejar sus sentim...

Capítulo 20 – Honeymoon - Parte 1

“ Los cantantes y actores: Choi Joonchae y Ok Jiyoung. Se pelean en los despachos de la agencia “Sons of Golden”, después de la inquietante noticia publicada sobre Ok Jiyoung y su escándalo tras los rodajes del dorama “Like you”. ¿Cómo creen que afectará esto a sus carreras? ¿Creen qué los conflictos están relacionados? Todo esto y más intentaremos averiguar.” Hanna miraba las noticias del móvil preocupada. Todas hablaban sobre que estaba pasando exactamente entre aquellos escándalos. -Hanna-ya!- entraba Joonchae entusiasmado a su despacho- ¡Tengo una idea genial! Al verlo Hanna tan entusiasmado pensaba que sería alguna gran idea para el proyecto de “The World”, aunque no fue así. -A ver, cuéntamela.- le decía entusiasmada. -Hablé con Jihoo-hyung y Yoona-ni. Y me dieron la mejor idea del mundo.- Hanna se extrañó un poco pero lo dejo continuar- Les conté lo que pasó con OK Jiyoung, y todo eso de que te amenazo y eso. -Es-espera, espera, espera, ¿qué? ¿Qué le hablas a...